Sí, los datos son el nuevo petróleo. Lo habrás oído, te lo han contado, lo habrás leído… pero,  ¿te has concienciado?

Los países que almacenan el petróleo no son ricos por el hecho de tenerlo, sino en función de los ingresos que generan. Por ello, tener la cantidad suficiente no tiene por qué significar que ya esté monetizado, hay que hacer un gran trabajo hasta llegar ahí. Es lo mismo que pasa con los datos, ya que su calidad se centra en el análisis que hagamos de ellos para que éste se convierta en valioso. En cambio, la mayoría de veces, la calidad del dato es ‘el gran olvidado’ lo que significa el comienzo de todos nuestros problemas. 

Aquí es donde ocupa un papel fundamental el ‘data driven’ (impulsado por datos). Disponer de un plan de negocio que se basa en los datos tiene muchos objetivos pero el esencial siempre debe ser que esos datos te ayuden como empresa a conseguir objetivos. Lo primero que tenemos que hacer es pensar en el plan de negocio que, realmente, son los datos y para ello no cabe la improvisación ya que la calidad no se puede improvisar sino que, por el contrario,  requiere cambiar mentalidad e invertir o perder mucho dinero. 

Big Data: dos palabras y siete letras y la materia prima más codiciada del momento. Es el objeto de deseo de las empresas, quienes ven en ellos una palanca para ensanchar sus negocios y ganar clientes.

Nunca un término habría costado a las empresas invertir más de 40.000 millones de euros a partir de este año, según predice la consultora IDC.

La fuente de energía que no contamina

Hay grandes abismos de diferencia entre la industria de los datos de hoy y el petróleo de hace un siglo, ¿la principal?  No contamina.

  1. Oferta. Una de las principales diferencias entre el petróleo y los datos es muy simple y atractiva: mientras que el petróleo tiene una cantidad finita, aunque todavía es abundante, lo que se espera, con toda seguridad es que se acabe ya que, además, los humanos utilizamos mucho más energía de la que se puede generar. 

En cambio, los datos son virtualmente infinitos. Existen tantos datos que nuestra principal preocupación debe ser qué hacer con ellos, no dónde encontrar más o cómo compartir lo que ya hemos encontrado. Lo que nos lleva a la diferencia clave. 

  1. Control de la mercancía. Muy pocas personas tienen una idea realmente clara sobre la huella digital que han dejado en línea. Pero los datos son algo que, en teoría, el usuario puede controlar, y que idealmente, se propaga por consentimiento.
  2. Velocidad. La última diferencia clave es que la industria de datos evoluciona mucho más rápido que la industria petrolera.

¿Qué tiene de bueno para tu cliente?

Actualmente, estamos en un mundo en la que la principal fuente de riqueza de las empresas que lideran la economía mundial son los datos, por tanto, no te puedes quedar atrás. Tenemos cuatro grandes ejemplos de empresas como son Microsoft, Apple, Amazon y Google que lideran el mercado actual gracias al uso que han sacado de los datos. 

El desarrollo y enriquecimiento de las grandes tecnologías se basa en el buen uso del Big Data, por eso, ¿vas a dejar que se te escape?

La aplicación del Big Data puede ser además muy beneficiosa para los usuarios. Un buen uso de los datos permite acceder a servicios cada vez más personalizados, mejorar la experiencia en el uso de aplicaciones, ahorrar tiempo a la hora de comprar, registrarse en una web o elegir los productos a consumir.

¿Cómo trabajar con datos?

Para trabajar con datos en Codenotch se deben tener en cuenta cuatro puntos: 

  • Identificar, limpiar y definir para hacer disponible el dato desde la fuente hasta su uso.
  • Tener la habilidad para construir análisis eficaces
  • Capacidad para traducir análisis en decisiones exitosas.
  • Liderazgo para persuadir a todos los intervinientes de la necesidad de esta organización.